Al iniciar esta semana sus actividades escolares, el director del Instituto Tecnológico Superior de Rioverde, Gerardo Martínez Sánchez anunció que fue instalada una campana de honor portadora de buenas noticias en el plantel, es decir cada que la toquen es porque algo bueno pasa.
Señaló que cuando un alumno termina su protocolo de examen profesional, y es aprobado, será tocada la campana, instalada en el exterior del edificio principal de la institución. “Nos gustaría que sonara muchas veces”, externó Martínez.
Si el instituto obtiene un premio por certificación o constancia, cuando los alumnos por investigaciones, méritos académicos, deportivos o culturales también será sonada, porque es algo importante y trascendental para la institución.
Este año el Tecnológico pretende tener maestrías de acuerdo a las carreras que ofrece, y de lograrlo será sonada, lo mismo cuando les den la autorización de las acreditaciones de las cinco carreras, que casi es un hecho, o las dos certificaciones en lo laboral y energía alterna, incluso cuando tengan la certificación del edificio libre de plástico de un solo uso, etc.
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