Como el rey de los giros de guion que es, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aprovechó una reciente falla en la vacunación para advertir de un posible "montaje" de los medios de comunicación, recordando además el famoso caso de Florence Cassez e Israel Vallarta del 2005.
A fines de la pasada semana, saltó a la prensa que una voluntaria inyectó erróneamente una vacuna anti-Covid a un adulto mayor en la Ciudad de México.
En un video tomado por un familiar del hombre, se observa claramente como la joven vacunadora inyecta la jeringa para sacarla un par de segundos después, sin tan siquiera haber presionado para insertar el líquido.
Este caso se sumó al de uno parecido en Sonora -en el norte de México- cuando días atrás un pasante médico vacunó por error con otra jeringa vacía.
En un México que suma más de 204.000 muertos por coronavirus y cada vez más polarizado, la noticia y el video corrieron como la espuma en redes sociales, llegando a ser tendencia.
Investigación en marcha
El caso creció mucho más y todas las partes implicadas, e incluso las no implicadas, salieron a dar su punto de vista.
En un primer momento, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) lamentó el "error" e informó que ya se había vacunado correctamente al adulto mayor y se reforzarían las "medidas de vigilancia".
Posteriormente, atribuyó el incidente a un cambio en los protocolos "por los constantes cuestionamientos que el acompañante del adulto mayor hacía a la voluntaria", y aseguró que se investigaría el caso.
En un sentido parecido habló la alcaldesa capitalina, Claudia Sheinbaum, que destacó que hay procedimientos "muy estrictos" y protocolos "muy específicos" en los 1,2 millones de dosis aplicadas en la capital, aunque habló tanto de un "error humano" como de la posibilidad de "otra circunstancia" y apoyó la investigación.
Mientras que en un breve boletín, el Instituto Politécnico Nacional (IPN) informó que la brigadista era estudiante de la carrera de Enfermería y calificó el suceso de "error humano", alegando que se revisarán los "procedimientos internos de capacitación".
Leña al fuego
Fue el mandatario mexicano quien levantó la liebre al hablar directamente de "montaje".
"Lo que hay que ver es si no fue montado, porque son capaces de todo. No sé usted, pero yo conozco a un periodista y un canal de televisión que era especialista en montajes, entonces no les tengo confianza", dijo López Obrador el lunes.
Horas después, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, fiel aliado de López Obrador, no descartó la "hipótesis" del "montaje", y habló incluso de una denuncia penal.
En este contexto, el periodista y productor Epigmenio Ibarra, amigo de López Obrador, atribuyó a la "derecha" la posible organización de esta "falsa vacunación" con apoyo de los medios, en un polémico tuit en el que hablaba también de la CIA, la agencia estadounidense.
La experta de la Sociedad Mexicana de Salud Pública Carolina Gómez descartó el "montaje", aunque pidió sanciones severas contra la voluntaria. "En vez de estar pensando en complots hay que tomar la reglamentación sanitaria en la mano y aplicarle una sanción severa", dijo a Efe.
"Plot Twist" Electoral
El remate final a este cúmulo de explicaciones y teorías conspirativas lo dio hoy el propio presidente, en su enésimo giro de guion.
Sin que se le preguntara el tema y tras dos horas de conferencia matutina, rescató el incidente él mismo para reiterar un posible "montaje" orquestado por adversarios y medios de comunicación, hoy día sus mayores enemigos y fantasmas.
Se remontó a 2005.
La francesa Florence Cassez y su entonces pareja, el mexicano Israel Vallarta, fueron arrestados el 8 de diciembre en la capital mexicana acusados de liderar una red de secuestros.
Ambos fueron detenidos en un macro-operativo policial que fue televisado en directo y que semanas más tarde resultó ser un montaje. Años después y tras un conflicto diplomático, la joven francesa fue absuelta y liberada por vicios en el proceso, aunque Vallarta lleva tres lustros en prisión preventiva.
"Solo hay dos explicaciones, que en efecto hubo un error o un montaje, que no lo descarto por la difusión tan grande. Con propósito de afectarnos. No son cosa del otro mundo los montajes", declaró López Obrador.
Incluso ha anunciado que, para "hacer consciencia" este miércoles dedicará buena parte de la conferencia matutina a emitir el famoso montaje tras pedir "permiso" a Televisa.
"Todo esto es pedagógico, que nadie se vaya a enojar", dijo.
Ha sonado algo forzado, y para los expertos tiene una clara connotación electoral porque el próximo 6 de junio se celebran comicios intermedios -los más grandes del país- y a él se le ha prohibido hacer propaganda de los proyectos gubernamentales.
"Todos los dichos del presidente sin importar la materia tienen una intencionalidad política y electoral. Son el resultado de un cálculo racional sobre los posibles beneficios electorales que le puede rendir", dijo a Efe Khemvirg Puente, politólogo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Para Puente -que recuerda que en México siempre ha habido montajes "frecuentes" del Gobierno, la oposición y los medios- en este caso lo que se busca es "minimizar los costos de una mala gestión de la pandemia".
Mas de esta seccion: Nacional
Notas relacionadas
Nota:Este espacio es para que opines con responsabilidad, sin ofensas, vulgaridad o difamación. Cualquier comentario que no cumpla con estas características apropiadas, será eliminado definitivamente.