Editorial Mi Rioverde

No pasará el aborto en SLP

La confrontación por el tema de la despenalización del aborto nuevamente ha cobrado notoriedad en el estado de San Luis Potosí, tras la negativa de la Comisión de Salud del Congreso del Estado que el jueves desechó la iniciativa, tachándola de improcedente.

Esta es la tercera comisión legislativa que rechaza la cuestión del aborto legal, pues previamente la de Justicia y Puntos Constitucionales la habían dictaminado en contra, aunque sin dar argumentos claros sobre su posicionamiento.

Llama la atención que precisamente la Comisión de Salud haya seguido la directriz de las otras, pues la exposición de motivos de la iniciativa señala al aborto como un problema de salud pública, pero al parecer para la presidenta de dicha comisión, Angélica Mendoza Camacho se trata de una problemática que no tiene interés en resolver.

Cuando se habla de aborto legal no sorprenden los votos en contra de las y los diputados del Partido Acción Nacional, pero sí de legisladores morenistas que, supuestamente obedecen a una corriente ideológica de izquierda; como el caso de Angélica Mendoza, que dejando a un lado la ideología partidista decidió emitir el dictamen en sentido negativo y rematarla con su voto en contra en la comisión.

Si bien, Mendoza Camacho justificó su voto alegando que obedecía a cuestiones médicas y científicas obtenidas en el foro informativo que un día antes realizaron; organismos internacionales como la OMS y la ONU han mostrado estudios que contradicen los dichos de la diputada, y han reconocido al aborto como un derecho humano de las mujeres.

La situación se ve complicada para quienes impulsan las iniciativas y que han buscado en varias ocasiones la reforma que otorgue el derecho al aborto legal, pues la línea que se ha seguido hasta ahora al interior del Congreso hace difícil que en el Pleno las y los legisladores tomen una postura diferente.

El alcalde no confía en nadie, y por nadie meterá las manos al fuego.

Sigue contradiciéndose el alcalde Ramón Torres García en sus declaraciones, y aunque pareciera torpe y brusco, esa parece la intenciòn de confundir a la opinión pública en torno a los hechos violentos registrados la semana anterior, con el tiroteo, persecución y operativo en la casa de seguridad, cuando dice que no metería las manos al fuego por su jefe de la policía, ni por nadie, y que muy apenas confía en él. Se nota. Entonces ¿ha perdido su confianza a todo aquél que lo rodea? Llegó al poder precisamente por sus colaboradores, no por su imagen, ahora tan desgastada, es decir, fueron chueco o derecho quienes le operaron la campaña y lo hicieron ganar. La postura, parece un mal agradecimiento, porque fue su gente quien luchó por estar ahí. Claro, luego llegará con ellos y les dirá que todo es falso, y que solo quiso salir del paso ante una pregunta incómoda.

Por otro lado la declaración se le arrancó por los reporteros en entrevista, cuando tuvo la oportunidad antes en la rueda de prensa del PAN el sábado, de contestar, pero se quedó callado y se escondió tras la figura de la dirigente panista, Elizabeth Morán quien claramente antes de contestar, dijo: "Aunque no me corresponde", propuso crear vigilancia vecinal y autoprotegerse por la situación tan delicada que pasa Rioverde, que ya luego en entrevista con el primer edil, dijo que no era cierto, que todo estaba tranquilo y que no pasaba nada, y que solo se cuidaran quienes andaban en malos pasos Ojalá y los ciudadanos tengan esa misma percepción, porque parece diferente.