Creatividad en palma: Hermelinda innova con diseños de nopales y pitayas en petates tradicionales

Santa María Acapulco, S.L.P. – Con más de tres décadas de experiencia, la artesana xi'iuy Hermelinda Correa Medina ha revolucionado la elaboración de petates tradicionales, incorporando diseños innovadores como nopales y pitayas que evocan la identidad cultural y natural de su región.

Originaria del municipio de Santa Catarina, Hermelinda aprendió el arte desde los 7 años y ha perfeccionado su técnica con el tiempo. Tradicionalmente, los petates se decoraban con figuras geométricas sencillas, pero ella decidió explorar nuevas formas de expresión: “Vi unas imágenes de nopales y me animé a probar. Llevé los primeros diseños a una feria en Rayón… y se vendieron rápido. Ahí nació la idea”, relató.

El proceso es tan delicado como laborioso: el petate se teje con palma que debe recolectarse en las montañas cercanas, donde las familias cruzan el río Mezquital para obtener materia prima de calidad. La palma solo se puede trabajar por la mañana, cuando está fresca; después se vuelve quebradiza por el calor.

Además del tejido, la palma se tiñe con tintes especiales traídos de fuera. El proceso implica hervir agua con pintura, sumergir la fibra, y luego enjuagar y secar antes de poder usarla para tejer.

“Entre preparar el material, pintar, y tejer, un petate puede llevarnos hasta una semana”, explica Hermelinda.

Cada pieza tiene un valor artesanal y cultural, y el precio puede variar según el tamaño y el diseño. Uno de sus petates decorados, por ejemplo, puede costar alrededor de 400 pesos.

“A veces la gente no entiende el valor del trabajo y quiere regatear, pero es mucho el esfuerzo… desde conseguir la palma hasta teñirla y tejerla”, lamenta.

Hermelinda también elabora charolas, sombreros, copilleros, alcancías, bolsas, collares, pulseras y cuadros decorativos, todos hechos con palma. Su trabajo no solo preserva las tradiciones de su comunidad, sino que las actualiza con una visión artística y comercial única.

Para quienes deseen adquirir sus productos, pueden encontrarla en Santa María Acapulco, municipio de Santa Catarina, donde junto a otras mujeres artesanas promueve la cultura local.

“Los invitamos a que nos visiten, que conozcan la iglesia, nuestras artesanías y lo que hacemos con nuestras manos y corazón”, concluyó.