Trabajadores del panteón municipal respiraron un poco en los primeros días de marzo al ceder un poco los fallecimientos principalmente por COVID y muertes violentas, desde diciembre hasta febrero, en que tenían hasta cuatro inhumaciones al día, y debía prorrogar la quinta hasta el siguiente día, dio a conocer el director del cementerio de Rioverde, José Anaya Zorrilla.
Señaló en entrevista que incrementaron hasta un 110 por ciento desde los meses de julio hasta diciembre, pero enero y febrero fueron todavía más complicados, pues además de las muertes violentas, también hubo las naturales y hasta suicidios.
A pregunta expresa de qué si habían incrementado las muertes, expresó: “Uyyyy… si subió mucho. Hubo meses que fue más del doble en relación con el 2019”.
Afortunadamente en marzo comenzaron a ceder un poco las muertes, pero pese a todo señaló que están preparados en determinado casos de haber una tercera oleada de COVID como desafortunadamente se espera, ante la movilidad que tendrán las personas por vacaciones de Semana Santa.
Terminaron 30 gavetas aéreas individuales, y al iniciar febrero empezaron la construcción de 25 gavetas triples subterráneas subdivididas que dan un total de 75 gavetas.
Señaló que pese a la contingencia vivida en que no se daban abasto, salieron adelante “Gracias a Dios”.
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